Buda: ¿Por qué estas tan triste?, apenas tienes 6 años y te sientas todos los días a lamentarte, ¿Qué es lo que te preocupa?
Shaka: hoy vi muchos muertos flotando en el río Ganges, y en la orilla muchos peregrinos purificándose. Tuve la impresión de que celebraban la muerte en vez de la vida. ¿Por qué es tan pobre este país donde nací?, parece que solo nacemos para sufrir y lamentarnos, la gente vive entre desgracias únicamente.
Buda: Shaka, ¿eso te pone triste?
Shaka: claro, quien quiere una vida llena de tristeza.
Buda: Shaka, donde hay tristeza hay alegría. Y es lo mismo del otro modo, hermosas flores florecen, pero eventualmente mueren, todo en este mundo está cambiando, siempre en movimiento, nunca igual, la vida del hombre es igual.
Shaka: pero si la muerte es inevitable entonces, ¿qué sentido tiene vivir?, y la tristeza es la que domina nuestras vidas, aun cuando superemos el sufrimiento, busquemos amor y felicidad, la muerte nulificara todo. No entiendo por qué nacemos en este mundo, cuando no podemos desafiar algo ten completo y eterno como la muerte.
Buda: parece que lo has olvidado.
Shaka: ¿Olvidado?
==========
Buda: la muerte no es el final de todo, la muerte no es más que otra transformación.
Las flores retoñan, después se marchitan...
las estrellas brillan, pero eventualmente se apagan.
Todo muere.
Esta tierra, el sol, las galaxias y hasta el mismo gran Universo no está excluido.
Comparado con eso, la vida del hombre es tan efímera, como un abrir y cerrar de ojos.
En ese instante,
un hombre nace, se ríe, llora, pelea, sufre, regocija, lamenta… odia y ama a otros.
Todo es transitorio.
Y luego todos caemos en el sueño eterno llamado muerte.
